En huelga conmigo: En autoconocimiento

Me despierto un día y exijo. Digo: “Necesito…” Lo que sea. Estoy en huelga. Reclamo que las cosas sean diferentes. Pido que otros hagan lo posible por cambiarlas.  De pronto, me paro y reflexiono: “¿Podría hacer algo más además de esperar a que se encarguen otros? ¿Cómo puedo tomar cartas en el asunto?” Voy a moverme. La actitud parece práctica. Sin embargo, nos olvidamos de un paso previo fundamental en el que deberíamos ocupar mucho más tiempo: el autoconocimiento

Es fácil que la idea te haya dejado en corto circuito. No sabes cómo he llegado a esta conclusión. Déjame que te explique. Si, por ejemplo, me estoy quejando de las condiciones laborales de mi puesto de trabajo, tu lógica establece que has de hablar con tu jefe. Es razonable. Sin embargo, te reto a que antes cojas todas tus suposiciones del pasado y las pongas en duda. Suelo aconsejar poner la idea en cuarentena

Huelga

Etimología
Palabra derivada del verbo holgar, que significa "descansar, estar ocioso".
A su vez procede de la palabra latina follicare que significa "respirar apresuradamente". De huelga, nació el vocablo juerga cuando, en Andalucía, este parón para descansar iba acompañado de música y baile.

De parón para acceder a mi sabiduría innata

Conviene detenerse a reflexionar antes de actuar para conectarnos con nuestro interior y escuchar detenidamente lo que acontece en él para así evitar dar pasos en direcciones equivocadas.  Conocer qué puedo aprender antes de accionar es una forma sabia de liderar nuestra vida. Para ello, es necesario dudar de lo que creo saber.  Y, si me lo permites, con unas preguntas, me gustaría probar a abrir tu perspectiva actual. 

Si ha permanecido hasta este momento en tu vida, es porque obtienes un beneficio estando como estás. ¿Cuál es? ¿Qué exactamente te hace sentir seguro en esa situación?

Solemos proyectar en frente lo que no somos capaces de ver en nosotros mismos. Cuando nos relacionamos, los otros activan nuestras inseguridades o vemos en ellos lo que no nos gusta de nosotros, pero no acostumbramos a reconocerlo.

Es sencillo reclamar más dinero. Es un hábito poner este instrumento en un lugar prioritario. Esa respuesta se da por inercia. Sin pensar. Pero prueba a mirar más profundo para conocer exactamente lo que deseas además de dinero.

Supongamos que lo que quieres es que se te tenga más en cuenta. Si no es eso, elige algo que sea inmaterial y no sea dinero.

La demanda anterior que he puesto como ejemplo podría ser satisfecha teniendo más iniciativa y sabiendo que tu valor no varía por la contestación de tu superior. Quizás estás deseando asumir una mayor responsabilidad que no te permites porque, de momento, no va asociado a mayores ganancias o porque tienes miedo a hacerlo mal.

Por no escucharme y no confiar en mi poder, elijo ir a la huelga en lugar de mirar cómo darme lo que de verdad deseo

Toda resolución que surja
de una mente ofuscada
lleva a la acción torpe.
Pero cuando brota de la mente clara,
lleva a una acción más oportuna y diestra.

Creando realidad con una bola de cristal obsoleta

Por no pararte a estar junto a ti, pides lo que, en el fondo, no satisface tu necesidad original. Luego te frustras si no lo obtienes o sientes decepción si lo logras porque no atiende a lo que precisas.

Sin darte cuenta, tratas de anticipar lo que va a pasar. En base a esas reflexiones sin contrastar, creas emociones que influyen en tus reacciones y dejas de estar en lo que de verdad está pasando. Desde esa negatividad, caes en la trampa de repetir lo que criticabas de otros. Aunque no lo admitas. 

Y, en muchos casos, te quedas con la sensación de haber perdido el tiempo, ése que dices que es oro, porque no obtuviste el resultado que buscabas. O, con mucha probabilidad, aparezcas en un callejón de infelicidad porque después de tus actos, tu escenario se ha quedado peor que antes. 

Son efectos secundarios de obviar los momentos que requerías para conectar contigo.  Previamente. Antes de actuar. Para escucharte y poder comunicar bien. Con paz interiorAntes de hablar en voz alta.

Sólo cuando la mente está libre
de ideas y creencias
puede actuar correctamente.

Antes de iniciar cualquier acción, conviene tomarse un tiempo de parón a solas para que, a la hora de contribuir a una nueva realidad que te guste más, no corras el riesgo de aportar más de lo mismo. Se requiere descondicionarse primero porque, sin librarte de la percepción que manda tu ego y sin conectarte con una mirada más profunda de lo que acontece, es fácil que no tomes buenas decisiones para conseguir los objetivos que anhelas.

La clave para conseguir lo que buscas está en vivir cada momento como lo nuevo que es.  Sin convertirlo en una repetición del pasado por tu necesidad de tener una falsa sensación de control.

Tu cabeza te engaña. Su verborrea dice algo así: «Ya sé cómo va a responder mi jefe… Es previsible lo que dirá mi mujer… Mi padre siempre contesta lo mismo….» Haz que se calle. 

Imagina que saliste a jugar y que ellos son tus compañeros de juego. De niños sabíamos hacerlo. Para crear un presente distinto, es preciso volver a sentir sin tiempo. Recordando que sólo existe ahora. Da igual si ayer nos enfadamos. Importa este momento.

no estoy en el ahora
Economía para Bruj@s
Economía para Bruj@s
Artículos: 64

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Solverwp- WordPress Theme and Plugin

alcanzando un éxito con sentido
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles. Puede acceder a la información completa pinchando aquí.